"Muchos de los compañeros que trabajan hoy en La Rosaleda no lo han conocido pero, los que tuvimos la suerte de trabajar con él, sabemos muy bien la gran persona que fue y todo lo que amaba nuestro centro.
Sólo pediros un cariñoso recuerdo para él y enviarle, allá donde esté, todo nuestro agradecimiento por tantas cosas como nos enseñó y por su maravillosa bondad para con todos.
Gracias Diego"
(texto de José Antonio Díaz García en memoria de Diego).
Querido Diego, déjame que homenajee tu memoria con una rama de jacaranda y algunas conchas marinas de Málaga. Sé que la Jacaranda, nuestra Rosaleda, la has llevado siempre en el corazón y con él has desentramado innumerables cuestiones durante tus horas de trabajo.
En mis recuerdos, en el buen hacer, estás siempre tú.
Que la tierra te sea leve, compañero
Isabel Pérez
Gracias
Diego.
