“No se trata de tener derecho a ser iguales, sino de tener igual derecho a ser diferentes”
Con esta frase, escrita al final de un vídeo donde nos presentaba su experiencia personal, Juan Andrés Teno Gutiérrez, ponía punto y final a una interesante conferencia sobre diversidad familiar, destinada al alumnado y profesorado de nuestro Centro.
Juan Andrés Teno Gutiérrez, Delegado de Andalucía de la Asociación de Familias LGTBI, “GALEHI”, especialista en Diversidad Familiar, acudió el pasado 8 de Mayo a nuestro instituto para participar como colaborador en una de las actividades del Plan de Igualdad de nuestro Centro y hacernos reflexionar sobre la amplia y compleja variedad de formatos familiares que conviven hoy día con el modelo tradicional de familia. Fue una interesante toma de conciencia de la necesidad de reconocimiento, igualdad y respeto para todas ellas.
En esta gran diversidad, familias monoparentales, homoparentales, adoptivas, acogedoras, reconstituidas, multiétnicas, extensas… son sólo algunos ejemplos. Estos tipos de familias conviven en alto grado en las estadísticas del INE con la familia nuclear, perpetuada, sin embargo, como único estándar en medios de comunicación, Internet y administraciones. Esta imagen ficticia de familia feliz heterosexual con hijos/as, vendida por los medios, según Juan Andrés, puede estar en la base de la incomprensión por parte de la sociedad y la mayor marginación y acoso que sufren los hijos/as de familias que no siguen este modelo impuesto.
En muchas ocasiones se invisibiliza a los hijos/as de estas familias diferentes, se les estigmatiza y se cuestiona la validez de la educación o la salud emocional que puedan recibir de estos nuevos modelos afectivos. Una incomprensión sin sentido, dirigida a unos niños/as que no eligen dónde nacer, que son educados desde el amor y la interacción sana de un núcleo feliz, sea cual sea su naturaleza. Unos hijos/as que deberían ser aceptados y valorados por la sociedad como otros cualesquiera y que jamás deberían estar en el punto de mira de un debate tan absurdo como este.
Una pareja heterosexual puede romperse, y el concepto de familia puede evolucionar hacia una familia monoparental o hacia una reconstituida... o hacia cualquier otra forma. Pese a todo, “aunque la pareja se separe, la familia sólo evoluciona… Se transforma, no se rompe…" Una familia, siempre será una familia, independientemente de su condición. Por eso, Juan Andrés nos invita a reflexionar sobre el derecho a ser diferentes y nos incita a perder el miedo a la búsqueda de nuestra propia felicidad, siendo nosotros mismos y amparados en nuestras propias convicciones: heterosexual, homosexual, trans, con hijos/as o sin hijos… Fieles a nosotros mismos, al fin y al cabo, independientemente de los cánones impuestos. Pero sobretodo, por encima de todas las cosas, nos invita a respetar y a mirarnos unos a otros desde el prisma de la comprensión y la igualdad.
Si quieres visualizar algunos de los vídeos mostrados en esta conferencia, puedes hacerlo cliqueando en los siguientes enlaces:
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